sábado, 14 de noviembre de 2015

ASOCIACIÓN DE FÚTBOL DE ESMERALDAS

Causas por las cuáles Esmeraldas no tiene futbol de primera división
Ing. Jorge Crespo San Martín
CAUSAS
Son económicas, de inversión, organizativas y planificativas dirigenciales y de desarrollo de procesos técnicos y tácticos.

Las económicas provienen del hecho que los gastos de programación de un partido de fútbol de alrededor de $ 1,200.00, que abarca los costos y pagos de: pintada de cancha, pasabolas, asesor de arbitraje, terna de árbitros y vocal de mesa, supera los ingresos por taquilla, porque el aparente profesionalismo no es rentable, los equipos tienen que pagar para jugar y además son pocos aficionados que pagan su entrada, la mayoría tiene la cultura negativa de entrar gratis. Algunos dirigentes para superar este inconveniente contraen deudas.

Es insignificante el aporte de los socios cotizantes del club y el apoyo económico de instituciones públicas y privadas, debido a la reducida implementación de estrategias de marketing del club y también a las limitaciones económicas y de gestión de la Asociación de Fútbol, que aunque no sea su competencia, debería negociar u ofertar los espacios publicitarios del estadio y los derechos de televisión de los exagonales y del cuadrangular final del campeonato nacional.
Un inversionista en una actividad productiva, comercial o de negocio con fines de lucro o de obtener alguna utilidad, pero minimizando el riesgo de perder y con alguna garantía y en fútbol la garantía son los derechos deportivos de los jugadores, pero si ya pertenecen al técnico a algún dirigente el inversionista no entra.

En la provincia no hay mecenas y los pocos dirigentes que administran los equipos son “chiros”, que no poseen la capacidad económica de sufragar los gastos que demanda la competencia.

Las causas organizativas y planificativas se relacionan con la deficiente estructura y dirección de los clubes, que no se los administran como instituciones o empresas con la contribución y coordinación de profesionales en todas áreas.

Este problema también es causado por la improvisación de procesos técnicos, tácticos y estratégicos del personal competente y comienza desde la pretemporada o fases de preparación, que no es completa o integral porque se tiene falencias en la parte médica, social, de nutrición: en fase de competencia muchas veces de se dispone de canchas de entrenamiento, hay dificultades de transporte, refrigerio, medicina y de sueldos que trastocan los micro ciclos de preparación adecuada.

En la mayoría de ocasiones no hay concentraciones y hasta se padece de implementación deportiva. Algunos jugadores no tienen una vida privada consecuente.
Cuando se interviene en los zonales el traslado de los equipos no se lo hace oportunamente y a veces pocas son las horas de descanso antes del partido a disputar.

La participación de los equipos esmeraldeños es dura y larga, primero es el campeonato local provincial que tiene una etapa clasificatoria de dos grupos de 5, o 6 equipos de los cantones Esmeraldas, Atacames, Quinindé y San Lorenzo y en la plazas del cantones Eloy Alfaro y Ríoverde , cada uno con partidos de ida y vuelta: la segunda etapa es el cuadrangular o liguilla para determinar campeón y vice campeón que serán los representativos que intervendrán en los inter zonales en los dos grupos de 6 equipos diferentes de otras provincias que le corresponden. Luego pasan a siguiente fase los dos primeros y los mejores terceros para conformarlos cuatro sextangulares y los campeones jugarán un cuadrangular final para lograr los dos puestos de ascenso con los dos mayores y mejores puntajes

EFECTOS
Los efectos o consecuencias afectan directamente a los jugadores, personal técnico y control de los dos equipos esmeraldeños, porque se les acaba el campeonato y los ingresos económicos en perjuicio de sus familias.
La moral, la autoestima y la cotización de los jugadores bajan y se ven obligados a buscar otras plazas de trabajo en otras provincias.

Esmeraldas pierde protagonismo a nivel nacional e internacional y continúa siendo la cantera o el semillero de los mejores futbolistas nacionales.
También la imagen de los dirigentes de los equipos y hasta de la AFE, se deteriora porque disminuye su credibilidad y confianza, además de su capacidad de gestión.

Algunos periodistas se quejan del respaldo de la afición deportiva cuando no asiste al estadio, pero no consideran que se aleja por los malos resultados.

Se incrementa la migración de los niños y jóvenes talentos del fútbol esmeraldeño, que son víctimas del acoso y propuestas de agentes y empresarios de otras provincias.

Los negocios de los actores indirectos como son los vendedores de refrescos, comidas, uniformes, taxistas se interrumpen y entran en recesión.
Todos estos efectos negativos provocan desilusión, frustración del pueblo deportivo esmeraldeño que espera un cambio total de mentalidad y actitud de los actores directos del fútbol y del aporte de sus autoridades e instituciones con soluciones a este problema.


Sugerimos que los dirigentes de los equipos en reuniones de trabajo promovidas por la AFE, expongan sus informes de participación con una rendición de cuentas claras y puntualicen cuáles fueron sus problemas para plantear las alternativas de solución para los próximos campeonatos, es decir presentar una nueva planificación integral con presupuestos reales.

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